Inicio de la sesión de trabajo tras salir del trabajo de verdad. Llegamos a Alcalá, cargamos el chasis y todos los hierros de la moto, incluidas las llantas, y los llevamos a granillar para quitarles toda la pintura. El chorro de arena debe dejarlo todo listo para pintar, porque, además, nos lo van a imprimar. Lo recogeremos el lunes por la tarde y ya veremos cuando lo pintamos y en qué color.
A la vuelta, después de un rato de charla con unos amables señores de verde camuflados en un Opel Astra azul que le han recetado a Manolo tres puntos y cien euros, nos hemos puesto con lo que nos quedaba por desmontar del motor: el embrague y la cadena de distribución.
Empezamos con la parte delantera. Para inmovilizar el cigüeñal hemos aprovechado que hay un pistón montado, pistón que no vamos a usar, por cierto, porque hemos comprado dos cilindros con sus correspondientes pistones, y lo hemos trabado con un taco de madera. Quitamos el alternador
Tambien sacamos el bote del encendido, que estaba en esta postura que pongo aqui que nos sirva de guía para iniciar la regulacion del avance del encendido cuando volvamos a montarlo

Ahora se nos plantea cómo ponerlo, porque unos dicen que en seco, otros que teniendo previamente en aceite el nuevo durante tres horas, otros que con paciencia, otros que con la herramienta especial de BMW. Por lo pronto vamos a dejarlo ahí y vamos a ver si nos hacemos una herramienta para poder ponerlo con comodidad.

Después de una ración de limpieza con el spray de limpiar los carburadores (tirando la casa por la ventana, vamos) el bloque del motor quedó así de bien.
Y con esto acabamos la sesión de trabajo. Ahí quedó eso.